Obviamente, debes haber escuchado acerca de las energías renovables en casa y de la enorme cantidad de compromisos internacionales que adquieren los distintos gobiernos para realizar una rápida transición hacia otras fuentes de energía mediante políticas ambientales específicas.
Pero, si en verdad te interesa el futuro del planeta y de las próximas generaciones, es fundamental que comiences a pensar en incorporar las energías sostenibles en tus actividades diarias, es decir, en casa.
Por ello, hoy quiero hablarte en detalle de esta alternativa, que, además de respetar el medio ambiente, es un factor concluyente en la lucha contra la emisión de gases de efecto invernadero, y, sobre todo, una forma de evitar el impacto que produce la contaminación en tu salud.
¿Qué son las energías renovables?
Sin embargo, no puedo entrar en detalles si no paso por el requisito de explicarte lo que son las energías renovables; esas fuentes que derivan de la utilización del sol, el agua, el viento o, incluso, elementos como la biomasa vegetal o animal.
Se trata de energías basadas en recursos que pueden renovarse ilimitadamente, se encuentran en todos los entornos y son mucho más profundas que aquellas asentadas en combustibles fósiles, las cuales provocan emisiones perjudiciales como el temido dióxido de carbono.
La generación de energías sostenibles es una garantía para reducir considerablemente las difusiones de gases de efecto invernadero.
¿Qué no son energías renovables?
Aunque seguramente lo has deducido, las energías no renovables son aquellas obtenidas de los denominados combustibles fósiles, entre los que resaltan el petróleo, el carbón y el gas natural.
Tardan cientos de millones de años en fraguarse, y lo peor de todo es la gigantesca cantidad de emisiones dañinas que generan al quemarse.
La crisis engendrada por el cambio climático es culpa en gran medida de los combustibles fósiles y, por ello, realizar la transición al uso de energías renovables es una prioridad que no sólo debe abordarse desde casa.
Beneficios y ventajas de las energías renovables
Las ventajas de las energías renovables constituyen razones de peso para que hagas una apuesta segura por ellas en tu hogar:
- Al no irradiar gases de efecto invernadero estás utilizando energías limpias, elemento fundamental si realmente quieres detener o aminorar el cambio climático.
- Los recursos de donde provienen las energías sostenibles son inagotables o pueden restablecerse naturalmente, porque hablamos del sol, el viento o la biomasa.
- Si quieres seguridad y salud para tu familia, impedir la polución del aire o del agua es un paso fundamental para lograrlo.
- Otro aspecto de gran trascendencia es el ahorro que aporta este tipo de energía, ya que algunas de las opciones permiten el autoconsumo, como la solar, que incluso permite prescindir de la factura de luz. Mientras que otras son capaces de disminuir el consumo de electricidad en un porcentaje cercano al 80%, como ocurre con la aerotermia o la geotermia.
- Para aquellos hogares ubicados en zonas rurales o localidades aisladas, una instrumentación de energías sostenibles, permite la llegada de la electricidad, además de impulsar la economía y el empleo.
- El control y la propiedad de las materias primas son motivos cruciales por los cuales los países entran en pugnas geopolíticas. Es algo que podrá evitarse al hacer la transición completa al uso de energías renovables, pues se trata de recursos compartidos al alcance de todos.
Energías renovables que puedes utilizar en tu casa
En este punto debo resaltar que tu elección de uno u otro tipo de energía sostenible depende en gran medida de las necesidades que tengas en casa, correspondientes también con las particularidades de la vivienda en que resides.
En todo caso, voy a describirte las alternativas más interesantes para aplicar en tu hogar, así como las formas habituales y más convenientes de instalarlas. Estoy segura de que será una información de mucha utilidad.
Energía solar fotovoltaica
Cuando se habla de hogares, esta es la opción más accesible y más conocida para generar energía eléctrica a partir de los rayos del sol. Se consigue mediante la disposición de placas solares. Es decir, aprovechando la radiación electromagnética producida por el sol, razón por la cual es tan popular en España.
Funciona con módulos fotovoltaicos que forman parte de una planta de energía donde se ubican cadenas de células exclusivas, instaladas a lo largo de varios metros. Estas celdas se orientan hacia la luz solar. Algunas pueden mantenerse inmóviles, otras tienen la capacidad de girar para buscar el mejor ángulo en relación con la fuente energética.
Energía solar térmica
Las habrás visto en muchas azoteas de edificios, ya que son módulos destinados a aprovechar la energía del sol para producir tanto agua caliente como calefacción. En este caso, la radiación solar calienta un líquido en el interior de las placas.
Igualmente, sirven para generar energía mecánica que deriva posteriormente en electricidad. Es una alternativa que puede alimentar también dispositivos de refrigeración que se convierten en acondicionadores de aire en tu vivienda.
Desde hace algunos años, cada vez más edificios de nueva construcción instalan placas solares para el agua caliente sanitaria, lo que significa un mayor ahorro en las facturas de energía de los propietarios.
Energía eólica
También tiene un uso doméstico, aunque no tan frecuente. Consiste en la obtención de energía a través del viento, utilizando aerogeneradores que poseen unas palas, las cuales son impulsadas por la fuerza del soplo de aire natural.
Si deseas instalar energía eólica para casa, debes tomar muy en cuenta si en el área donde resides hay suficiente viento. De la misma forma, tienes que estar informado de si la normativa vigente permite en ese lugar la instalación de aerogeneradores y si existe el espacio suficiente para emplazarlos.
Esta fuente de energía tiene un enorme potencial que podría llegar a aprovisionar a toda Europa, de acuerdo con estudios realizados por la Agencia Europea de Medio Ambiente.
Bioenergía
Tal vez has escuchado hablar de ella como “biomasa”. En este caso, hablamos de una forma de energía que consigues a partir de la utilización de materia orgánica o de residuos forestales, como madera u otras sustancias. Su eficiencia está comprobada y alcanza hasta el 90% en algunos casos.
Un ejemplo digno de mencionar en los hogares son las calderas o estufas que convierten desechos orgánicos o materia de origen vegetal o animal en una opción energética económica, limpia y capaz de ahorrar un 70 por ciento en comparación con derivados del petróleo.
Energía geotérmica
El interior de la tierra también ofrece un calor natural que conocemos como energía geotérmica, un recurso que no causa ningún impacto negativo en el medio ambiente y puede explotarse sin agotarse jamás. A través de esta opción puede obtenerse energía renovable y limpia, sobre todo en regiones volcánicas.
Energía hidráulica
Aunque parezca complicado, valerte de una caída del agua para producir energía es posible en la casa, pues se trata de aprovechar la energía potencial del vital líquido, tal como sucede a gran escala en centrales hidroeléctricas, presas y canalizaciones.
Cuando hablamos de tu hogar, la energía hidráulica consiste en buscar la diferencia de presiones para entonces emplear un circuito de turbina y generador que pueda generar energía eléctrica.
Conclusión
Sin duda, es de suma importancia incrementar la utilización de energías renovables en casa. En primer lugar, como una manera inteligente de evitar la contaminación que conduce a diversos problemas de salud para la familia.
Además, si realmente queremos tener un futuro en este planeta y asegurarle una mejor vida a las próximas generaciones, es esencial integrar las energías sostenibles en el ámbito de nuestros hogares.
Conocer los tipos de energía renovable, sus ventajas y cuál opción podría adaptarse a tu casa, puede ser igualmente una poderosa contribución en la lucha contra la emisión de gases de efecto invernadero y los perjudiciales efectos del cambio climático.