Cuando hago un proyecto de interiorismo y decoración muchos clientes me plantean la posibilidad o no del uso de alfombras y los lugares donde deben colocarse.
Considero que sí, en primer lugar porque tienen un claro carácter decorativo, dan categoría y además delimitan ambientes que pueden estar ubicados en un mismo espacio, como por ejemplo un salón-comedor.
Otra duda que tienen a menudo, es sobre qué tipo de suelos deben colocarse. Se cree erróneamente, que sobre un material frío como un mármol o porcelánico van bien y que sobre uno cálido, como una madera o moqueta, no vale la pena. ¡Gran error! Existen, además, un montón de materiales que podemos elegir en función del clima y del lugar donde vayan a ir colocadas, y, por supuesto, siempre materiales naturales. Desde la cálida lana y las combinaciones de lana y seda en distintas proporciones, hasta materiales mucho más rústicos y adaptados a climas más cálidos como la fibra de coco, el yute o el sisal.
Desde luego, en mis trabajos, siempre las utilizo, sea cual sea el material que tenga debajo. Aquí tenéis varios ejemplos…
