Lujo y piezas exclusivas han definido su trabajo durante cuatro décadas. Peter Marino es un verdadero interiorista de la moda del cual quiero hablarte esta vez. El talento de este arquitecto neoyorquino ha estado vinculado a grandes nombres como Giorgio Armani, Yves Saint Laurent, Ermenegildo Zegna y muchos más.
¿La razón? En los años 70, nada menos que Andy Warhol le encargó el interiorismo y decoración de su casa. A partir de allí, vinieron los diseños para boutiques tan importantes como la de Dior, Fendi, Chanel o Vuitton, sin mencionar que recientemente es el encargado de cambiar la imagen de las tiendas LOEWE alrededor del mundo. Te invito a conocer muchos más detalles sobre el trabajo del arquitecto Peter Marino.
Redelinear la suntuosidad
¿Cómo consiguió convertirse en un arquitecto tan influyente a nivel internacional? Te lo diré: la respuesta se encuentra en la integración que ha hecho del arte en sus reconocidos diseños de interiorismo. Es así cómo ha logrado redelinear la suntuosidad en los mundos de la decoración y la arquitectura.
Por supuesto, previamente vino un camino académico que este estadounidense nacido en 1949, transitó con dedicación. Todo comenzó con un título de la Universidad de Cornell en Arquitectura, Arte y Planificación. Seguidamente, pasó por varias empresas y comenzó a construir una carrera sólida.
El año 1978 fue cuando fundó la firma de arquitectura y diseño que aún preside, y la cual posee sedes en Nueva York, Filadelfia y Southampton con casi doscientos empleados.
La relación con Warhol
Precisamente, fue en 1978 cuando fue contratado por Andy Warhol para llevar a cabo un proyecto de renovación de su hogar en el Upper East Side de Manhattan. Además, Marino fue el autor del tercer cambio de imagen de la Warhol’s Factory, ubicada en el 860 de la calle Broadway.
Lo que vino después de la relación entre Peter Marino y Andy Warhol fueron importantes comisiones residenciales de clientes que pertenecían al ámbito del arte como a hogares aristocráticos de Europa.
Pero lo que llegó después fue simplemente masivo: conceptos de venta para tiendas minoristas.
Los conceptos de venta minorista
En 1985, Marino fue contratado para diseñar el concepto de venta minorista de la tienda departamental Barneys New York, dedicada al público femenino. Y, como he dicho, hubo mucho más, pues tras este primer proyecto, fue comisionado para diseñar 17 amplios almacenes independientes de la misma marca, no solo en Estados Unidos sino en Japón, trabajo que estuvo realizando hasta 1993.
Es el tipo de trabajo que puso a Marino con grandes presencias de la moda, para quienes diseñó boutiques, entre ellas Calvin Klein, Louis Vuitton, Giorgio Armani, Donna Karan o Ermenegildo Zegna. Luego vinieron también diseños para las boutiques de Dior y Chanel.
Aquí vale la pena mencionar el diseño que en 1996 hizo para Armani, donde, de acuerdo con los especialistas, reflejó a la perfección el estilo del gran modisto mediante el “minimalismo de marca registrada” que exhibía la tienda en la neoyorquina Avenida Madison.
Tiempo después, en 2004, el prestigioso diario The New York Times elogió esta tienda como ejemplo de que un diseño arquitectónico puede generar una total identificación entre el comprador y la marca.
La Torre Chanel
2004 fue también el año en que otro diseño de Marino conmocionó al mundo: la Torre Chanel. Una edificación de 56 metros de altura donde utilizó brillantemente el patrón blanco y negro de tweed característico de la Casa Chanel y lo encapsuló en un componente de aluminio.
La tienda, situada en el exclusivo distrito japonés de Ginza, es todo un prodigio que no deja de asombrarme con su fachada interactiva de vidrio que incorpora 700 mil diodos emisores de luz, así como, un cristal electrónico que permite a los empleados ver hacia afuera cada vez que cambia su estado. Y para terminar, la Torre Chanel cuenta con un sistema de persianas de lona que cubren más de mil metros cuadrados.
Más proyectos que sorprendieron al mundo
En 2007, otra de las obras de Peter Marino fue un proyecto ubicado en un ostentoso condominio en la Gran Manzana; un extenso vestíbulo de mármol que dirigía a un jardín con cascada en la parte trasera.
Siete años después, su diseño para una marca minorista de productos de lujo en Corea del Sur también sorprendió al mundo con dos edificios angulares recubiertos de mármol blanco y enlazados por puentes de vidrio. La tienda insignia para Boontheshop es toda una atracción turística en el barrio de Cheongdam-dong.
Por si fuera poco, en 2015 ya Marino estaba completando la tienda insignia para Louis Vuitton en Rodeo Drive, en el famoso Beverly Hills de California.
Marino no descansa
Otro ejemplo del enorme talento de los diseños de Peter Marino, es la tienda principal que creó para Hublot en 2016, en la Quinta Avenida de Nueva York. En este caso, se encargó no solo del diseño del edificio sino de los interiores, dando lugar a la más elevada boutique de esta marca de relojes suizos.
Marino sencillamente no descansa y una prueba contundente son otros proyectos que demuestran su capacidad creativa. Uno de ellos es otra torre de gran altura para Chanel en Tokio, concretamente en el exclusivo distrito de Namiki. En paralelo, ha sido comisionado para diseñar los buques insignia de Chanel en París, Nueva York y Seúl.
Asimismo, encontramos un condominio de 11 pisos llamado The Getty y una galería de arte en el lado oeste de Manhattan situada en un parque lineal. También debo incluir aquí el nuevo buque emblema para la marca Louis Vuitton, ubicado en el Place Vendome de París, y también en la ciudad luz, un hotel para la marca Cheval Blanc La Samaritaine. A todo lo mencionado debo añadir “The Lobster Club” un restaurante ubicado en el Seagram Building de Nueva York.
Por último, es importante destacar que Peter Marino es también un connotado coleccionista de arte. Sus piezas favoritas son las de porcelana francesa, así como, bronces italianos de mediados del siglo XVI hasta la primera mitad del siglo XVIII.